La Policía le pidió el DNI a Spiderman en la estación de Longchamps

Spiderman, parado en el andén de una estación de tren, habla con dos policías que le hacen preguntas. Un agente consulta algo en su teléfono y una uniformada completa la extraña escena que podría ser de alguna película protagonizada por Tom Holland, pero en realidad tuvo lugar en la estación de trenes de Longchamps.

Un del tren Roca fue testigo del peculiar encuentro desde la plataforma de enfrente y sacó una foto que se hizo viral en redes sociales y portales de noticias, con un título que variaba poco de una publicación a otra: La Policía demoró a Spiderman.

La historia generó toda clase de chistes y comentarios, además de muchas referencias al personaje creado por Stan Lee y Steve Ditko en los cómics de Marvel de los años 60 y que desde entonces es el superhéroe más popular de todos, sobre todo entre los chicos. Pero ¿qué estaba pasando esa tarde en la estación?

Poco a poco se fueron conociendo detalles del contexto, se supo que todo fue un pequeño malentendido, y que este Hombre Araña conurbano no fue detenido ni tampoco demorado por ningún delito. Lo cierto es que es bastante conocido en las calles de Almirante Brown porque suele tener un puestito callejero en el que vende libros para colorear a la salida de los jardines. También se saca fotos con los chicos y mantiene su personaje siempre: a pesar de que todos lo ven hace meses, nadie le conoce la cara, porque siempre lleva puesta la máscara.

Pero el día de la foto, que fue en mayo, Spiderman no estaba en su lugar de siempre sino en la estación, supuestamente pidiendo dinero para comer. Los policías que estaban asignados a la estación, según confirmaron los propios agentes a El Diario Sur, fueron a pedirle sus datos ya que no lo conocían y era imposible ver claramente su rostro.

La cuestión se volvió aún más insólita cuando los policías explicaron que lo habían confundido con "otro Spiderman" que trabaja más que nada en la zona de Guernica y suele viajar en esos trenes. No confundir con un tercer Spiderman que canta temas románticos con un parlante en la peatonal Rivadavia de Quilmes.

Sin embargo, este otro arácnido tenía un detalle que a los agentes les dio la pauta de que era nuevo en la estación: sus zapatillas deportivas blancas y negras. Finalmente, pudieron tomarle los datos y lo dejaron seguir con lo suyo, manteniendo -eso sí- a resguardo su verdadera identidad.