Quiénes son los poliamorosos que organizan el primer encuentro de triejas en Brasil

Priscila Mira (41), Marcel Mira (41) y Regiane Gabarra (36) se entregaron al poliamor hace ocho años. Lo que al principio parecía difícil se convirtió en un camino sin retorno. La relación se consolidó, los tres tuvieron un hijo y hoy organizan el primer encuentro de triejas de Brasil en Pinhalzinho, en el interior de San Pablo.

Pero no siempre fue así: Priscila y Marcel fueron un matrimonio monogámico y convencional durante 15 años. Fue entonces cuando apareció Regiane y debieron replantearse las normas conocidas hasta allí.

Las mujeres se conocieron cuando trabajaban juntas y se hicieron amigas; la amistad se transformó en amor y, cuando el hombre tomó o con esa tercera que había conquistado a su esposa, sintió algo parecido. Eso fue en 2018 y, a partir de ese momento, no se separaron más.

“Nuestras familias existen, persisten y resisten”, aseguraron al explicar la motivación del encuentro que tendrá lugar el 20 de septiembre y lleva inscriptas al momento unas 35 triejas.

Criar en el poliamor, un caso legalmente reconocido

En la historia de esta familia existen tres hijos previos al poliamor: Reginaldo (21), Sara (17) e Isabela (12). A medida que el vínculo entre los tres se fortalecía, al mismo tiempo crecía un deseo: tener un hijo más y que lo gestara Regiane, quien aún no había pasado por un embarazo.

Para ello debieron recurrir a la fertilización in vitro, ya que Reginaldo se había realizado una vasectomía previamente. Lo lograron en el primer intento así y llegó el anhelado bebé, Pierre, que “hoy tiene 3 años y en cuyo certificado de nacimiento tiene los nombres de ambas madres y de su padre. ¡Es legalmente hijo de tres personas!”, destacaron en diálogo con Clarín.

El niño, aseguraron sus madres y padre, se lleva muy bien con sus hermanos mayores. En su casa, mencionaron, el poliamor se vive de un modo natural y la crianza en medio de ello no supuso problemas. “Creo que es más fácil. Además de mostrarles cada día con acciones y amor que la vida privada de cada persona no moldea su carácter, y que cada uno vive como cree que es mejor, pueden saber que ser hijos de una trieja no los hace peores ni mejores”, destacó Priscila.

La mujer añadió que ser tres para las tareas de educación y cuidado sólo trae consecuencias positivas. “Hoy en día sería extraño imaginar nuestra familia sin ser tres padres”, reconoció.

Cómo será el encuentro de triejas: "No tiene nada que ver con la promiscuidad"

Priscila, Marcel y Regiane itieron que, si bien en Brasil se habla mucho de poliamor, no es algo masivo. En ese marco, el desconocimiento al respecto es mucho, dijeron: “La gente lo confunde con la poligamia y las relaciones liberales. La sociedad es ignorante al respecto y termina teniendo prejuicios cuando se trata de una relación poliamorosa”.

Esa es una de las motivaciones que los llevaron a planear el primer encuentro de triejas de Brasil: visibilizar y erradicar mitos. Aunque al comienzo de la iniciativa pensaron en una reunión en su casa con algunas personas a las que habían ado a través de las redes sociales, la magnitud del evento se incrementó y los llevó a una mayor organización.

“Cuando lo anunciamos, nos quedamos impactados: la cantidad de triejas interesadas era mayor que la que cabía en nuestra casa”, afirmaron entre risas. “Así que decidimos hacer algo más grande y organizado. Alquilamos una posada y allí recibiremos triejas de todo Brasil. Algunos viajarán más de 12 horas para estar con nosotros, para demostrar que nuestras familias existen y que somos personas con sentimientos, hijos y responsabilidades”, enfatizaron.

La celebración contará con almuerzo, música en vivo y “mucha charla”, según comentaron. “¡Estamos felices y somos optimistas! Compartiremos experiencias en un lugar acogedor donde las familias puedan sentirse 'normales' entre sí”, resaltaron.

El objetivo, concluyeron, es mostrar que su realidad “no tiene nada que ver con la promiscuidad ni con las relaciones problemáticas”. “Esperamos tener más visibilidad, más allá del foco de la promiscuidad, para demostrar que nuestras familias existen y son mucho más de lo que la gente imagina; esperamos poder normalizar nuestra forma de vida, y con ello, lograr derechos legales para proteger a nuestras familias”, finalizaron.