Julio Moura habló por primera vez tras la misteriosa muerte de una mujer en su casa: “Mi silencio hasta hoy fue por respeto”

En la madrugada del 3 de enero de este año, Andrea Murillo Rojas (53) fue hallada muerta en una casa de Villa Elisa. El dueño de la vivienda es Julio Moura (68), guitarrista de la emblemática banda Virus, sobre quien recayeron las dudas de la familia de la mujer. El músico se mantuvo durante meses en silencio hasta ahora: en las últimas horas decidió hablar a través de un breve posteo en su cuenta de Instagram.

"Mi silencio hasta hoy fue por respeto a tu familia, a tus seres queridos y a la Justicia para todo lo que necesiten de mí", expresó Moura en el comienzo del texto que acompañó una foto en primer plano de Andrea.

"Hoy te recuerdo y quiero expresar a todos la maravillosa mujer que fuiste, eres y serás. Tu amistad fue algo que me llenó de gratificación. Estarás en mi corazón por siempre, y honraré tu vida, vida que nada le importó a los que construyen la opinión pública”, continuó, para cerrar el posteo que "ante la dicha de haberte conocido Andrea… solo debo decir: 'gracias a la vida'".

Andrea Murillo vivía en la región de Araucanía, en la Patagonia chilena, donde tenía un emprendimiento de velas y arte botánico, llamado Botánica Savoy, dedicada a obras con elementos de la naturaleza.

Su familia dijo que no tenía una relación de pareja con Moura y atribuyó su vínculo al fanatismo de Andrea por Virus. "La amistad entre ambos se dio hace un par de años de forma virtual y a distancia, y no fue hasta hace unos meses atrás que se volvió presencial. Andrea fue invitada a Argentina como segunda instancia, viajando a dicho país. Cualquier relación amorosa que haya mantenido con el involucrado nunca fue dada a conocer a nuestra familia ni al público en general", aclararon sus padres, hermanos e hijos en un comunicado difundido poco después de su muerte.

Lo cierto es que el viernes 3 de enero la mujer fue hallada sin vida en la casaquinta de la calle 419, donde vive el hermano de Federico Moura, el legendario músico. Según pudo saber Clarín, era la tercera vez que Moura se veía personalmente con Andrea, que había llegado al país entre el miércoles y el jueves para instalarse en la casa del músico durante unos días.

En la casa de Villa Elisa el bolso de Andrea estaba sin desarmar, como si recién hubiera llegado a destino. Y para las 2 de la madrugada del 3 de enero, la Policía llegó a la casa de Villa Elisa y encontró a Andrea sin vida. Fue después de que Julio Moura -en aparente estado de shock- llamara a su ex esposa, Lucía Castelli (53), para relatarle la escena. Ella pidió ayuda a los agentes y llamó una ambulancia.

La autopsia, se supo después, confirmó que la mujer murió por "ahorcamiento". Tenía en el cuello una soga tipo casera con un "encadenado" en uno de los extremos, describieron fuentes judiciales. También detectaron un golpe en la cabeza, pero los peritos lo atribuyeron a la caída.

De acuerdo a la versión de Moura, ambos practicaban un "juego sexual" consentido: Andrea estaba colgada a una viga del techo cuando se habría descompensado. El músico la descolgó y cayeron al suelo.

Él tenía un golpe en el brazo compatible con esa acción y, de acuerdo a los investigadores, "había rios acordes a la práctica sadomasoquista" en la propiedad.

D.D.