Masters 1000 de Madrid: Ben Shelton mostró su aura anti argentinos contra Mariano Navone y remontó frente a su novia Trinity Rodman

Cuatro argentinos tenían acción programada para este viernes en el Masters 1000 de Madrid, una de las últimas paradas importantes de la gira de polvo de ladrillo que sirve de preparación para Roland Garros, y os primeros tres cosecharon victorias muy auspiciosas: Francisco Cerúndolo le ganó con autoridad a Harold Mayot, Francisco Comesaña se llevó un triunfazo sobre Arthur Fils y Juan Manuel Cerúndolo se dio un gustazo contra Félix Auger-Aliassime, en su primera alegría contra un top 20.

Sin embargo, el desafío más grande de la jornada en la Caja Mágica, a orillas del río Manzanares, lo tenía Mariano Navone, que se medía con Ben Shelton, y "La Nave" no pudo con el verdugo de los tenistas argentinos, dueño de un récord arrollador al que habrá que adjudicarle un a cifra más: está 10-0 contra los albicelestes. Esta vez cedió el primer set y tuvo un break en contra 0-2 abajo en el segundo, pero lo dio vuelta a pura potencia y bajo la atenta mirada de su novia, la futbolista Trinity Rodman, hija del recordado exbasquetbolista de los Chicago Bulls, Dennis Rodman.

El marcador final fue 4-6, 7-6 (5) y 6-3 tras casi dos horas y media de partido: Shelton, que ya le había ganado a Navone hace poco en Indian Wells y el año pasado en Tokio, deberá enfrentarse en la próxima ronda contra Jakub Mensik.

Mariano comenzó el partido dispuesto a darle batalla a Shelton, quien arrancó algo frío y fue ajustando su zurda con el correr de los games. En el primero amagó el argentino, que tuvo un punto de quiebre, y recién en el quinto volvió a tener opción de arrebatarle el servicio a su rival pero necesitó de cuatro oportunidades para meter el zarpazo y ponerse 3-2 arriba.

Shelton se puso en modo Terminator cuando le tocó sacar 0-40 y 3-5 abajo en el marcador, dándole tres set points a Navone, que no supo aprovechar. Punto a punto, el nacido en Atlanta, Georgia, fue dándolo vuelta: primero se puso 4-5 y luego contó él con un punto para quebrarlo a Mariano y poder empatar todo 5-5.

Pero allí salió a flote La Nave Navone, firme desde la cabeza y con tres puntos consecutivos que festejó con todo, con el aliento del público español que lo adoptó como propio, para ponerle la rúbrica a un primer set 6-4 de color albiceleste, ese que suele ser sinónimo de alegría segura para Shelton.

El segundo parcial comenzó con viento a favor para Navone, que se aprovechó del quedo de su rival y lo quebró en el primer game. Luego tuvo una chance para volver a romperle el servicio para quedar 3-0 pero ahí sí Shelton activó el turbo y se recuperó. Fue un golpe para el argentino, a quien le esperaría uno todavía peor: sacó 5-4 para quedarse con el partido y el americano respondió con contundencia, quebrándolo en cero y emparejando el marcador en 5-5.

El público en Madrid se dio vuelta, deseoso de ver más tenis. Shelton se puso 6-5 tras un 40-0 y Navone hizo lo propio, también cumpliendo en su game sin puntos de su adversario. En el tie break sacó chapa el zurdo, con mejor postura y la confianza en alza, aprovechando el tercer set point, con un 7-5 que celebró llevándose el dedo al oído, y mandando todo al tercer capítulo.

Era un Shelton diferente pero también otro Navone, hundido frente a los fantasmas de ese adversario que parece agrandarse contra los argentinos. El tercer set empezó palo y palo, con Navone ganando el primer game en 40-0 y a Shelton respondiendo de la misma manera para ponerse 2-2. Nadie se quebraba pero el estadounidense era el que parecía disfrutar el partido, sonriendo ante cada punto, incluso en los que perdía.

Así llegó el séptimo y fallido game: Shelton quebró a Navone dejándolo en cero, y su mirada se cruzó con la de la futbolista Trinity Rodman, su novia e hija del exbasquetbolista Dennis Rodman. Había olor a remontada para el 13 del mundo.

Por eso no sorprendió que un rato después Shelton volviera a quebrar a Navone, con el argentino completamente fuera del partido. El estadounidense festejó fiel a su estilo, primero enojado, luego dando un grito y finalmente abalanzándose contra un grupo de fanáticos que lo alentó en el tramo más difícil del partido. En su platea, Trinity sólo sonreía.

Ben Shelton, el verdugo de los argentinos

El estadounidense, 13° del mundo, ahora acumula una racha de once triunfos ante argentinos, diez de ellos en certámenes del circuito ATP.

Shelton, de 22 años, venció a Navone por primera vez el año pasado, en los octavos de final del ATP 500 de Tokio, con un sólido 6-4 y 6-3. Y lo superó otra vez en la segunda ronda del Masters 1000 de Indian Wells, a principios de marzo, por 6-3 y 6-2.

El bonaerense es uno de los seis argentinos que fueron doblegados al menos una vez por el estadounidense.

El primero fue Román Burruchaga, en los cuartos de final del Challenger de Little Rock de 2022, el único de los triunfos del norteamericano ante rivales albicelestes fuera del circuito más importante del tenis masculino. Por entonces, Shelton tenía 19 años, se ubicaba 547° en el ranking y daba sus primeros pasos en el profesionalismo.

El que más veces lo sufrió fue Tomás Etcheverry, que perdió los tres duelos del historial, todos en la temporada pasada. En las semifinales del ATP 250 de Houston, sobre canchas lentas, en la segunda ronda del Masters 1000 de Cincinnati y en la primera del 500 de Basilea, esos dos sobre superficie dura.

Shelton además derrotó dos veces a Francisco Cerúndolo, en la tercera rueda de Indian Wells 2024 y en las semifinales de Munich, la semana pasada. "Es una gran victoria para mí. Ganar en polvo contra alguien como él me da mucha confianza", dijo después del festejo que lo metió en final, en la que luego perdió con Alexander Zverev.

Los otros dos argentinos en la lista de derrotados del estadounidense son Sebastián Báez y Pedro Cachin. Al bonaerense lo venció en el debut del 250 de Auckland de 2023 y al cordobés, en la primera ronda del US Open de ese mismo año, en el que terminó alcanzando por primera vez las semis en un Grand Slam.